Como influye el calzado en tu salud

En la sociedad actual se da mucha importancia a la estética, a veces a costa de ocasionarnos problemas en nuestra salud. Un ejemplo es el calzado que usamos, ya que muchas veces elegimos un modelo que está de moda teniendo en cuenta solo su apariencia y nos olvidamos de que la función principal del calzado es la de proteger nuestros pies y en caso de no elegirlo apropiadamente, el uso habitual de un zapato inadecuado puede producir daños irreversibles en el cuerpo.

A continuación te damos unas recomendaciones para que sepas elegir correctamente este importante accesorio y que tu bienestar no se vea afectado:

–Elige el calzado de tu talla. Dependiendo del fabricante esta puede variar por lo que te aconsejamos que te los pruebes en ambos pies y te asegures de que se adaptan perfectamente a tu pie y no te molestan al caminar. Tu pie debe entrar en el calzado de forma natural, sin forzar ninguna parte de él. Los zapatos demasiado ajustados pueden dar lugar a que aparezcan durezas en los pies y malformaciones muy dolorosas como juanetes y dedos en martillo. Además los pies se cansan antes y las uñas se pueden encarnar y en algunos casos incluso se forman hongos. Llevar unos zapatos inadecuados aumenta el riesgo de caídas y pérdidas de equilibrio y a pesar de esto, la mayoría de las personas mayores (un 83%) no utilizan la talla que les corresponde.

-Los expertos aconsejan que las personas mayores con problemas en los pies utilicen zapatos de horma ancha, con un sistema de ajustes con correas o velcros y suelas de goma para evitar resbalones y caídas, además con este tipo de calzados conseguimos reducir también el impacto en las articulaciones y la presión al caminar.

–Evita los zapatos con tacón porque el peso del cuerpo se distribuye de manera inadecuada, sobrecargando la zona delantera del pie. Esto puede provocar inflamación y dolor en la zona del metatarso. Esto puede ocurrir incluso con zapatos de tacón de pocos centímetros.  Aunque, lógicamente, cuanto mayor sea la longitud del tacón, peor se apoya el pie y como consecuencia se pueden llegar a padecer problemas en las rodillas, en los pies, contracturas de gemelos, e incluso puede provocar artrosis. También se corre el riesgo de esguince de tobillo e incluso de rotura. Para conseguir una distribución idónea del peso corporal el tacón recomendable para una persona adulta es de aproximadamente 2 cm, desaconsejándose el uso de tacones de más de 4 cm. A partir de aquí, a medida que añadimos centímetros se produce un aumento de la presión en la parte delantera del pie. Así mismo, los expertos recomiendan diferentes alturas máximas en función del tipo de usuario.

–Los zapatos totalmente planos tampoco son la solución porque su uso diario también perjudica a nuestros pies. El zapato se debe adaptar a la curvatura de la planta del pie, y si es muy plano el tendón de esta zona se tensa y surge la fascitis plantar. Además pueden provocar dolores de cadera, espalda y tobillos y dar lugar a que se tengan los pies planos.

–Los zapatos de tacón, si te gustan, debes usarlos con moderación, reservándolos para contadas ocasiones como eventos o celebraciones especiales. En estos casos es preferible el uso de plataformas porque cuentan con más base de apoyo.

–Deshecha los zapatos con punta muy estrecha porque tus dedos se tienen que poder mover dentro de ellos con normalidad, sin sentirse comprimidos.

– Lleva a cabo un cuidado diario y correcto de tus pies, recuerda que son la base de apoyo de todo tu cuerpo.

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