Farmacia El Pilar

Neuroma de Morton, la afección de la Reina

Neuroma de Morton, seguramente les sonará el nombre a raíz de habérsele diagnosticado esta dolencia a la reina Letizia este verano. En el siguiente post te contamos en qué consiste, formas de prevenirlo y tratamientos de este mal que aqueja, no solo al pie de nuestra reina, sino también al de muchos de nosotros.

El neuroma de Morton es una afección en la que se produce un tumor o crecimiento anormal en uno de los nervios que conectan los huesos del pie con el cerebro. La lesión o irritación de este nervio, que se encuentra concretamente en la parte posterior de la planta del pie y se conoce con el nombre de nervio interdigital, puede causar dolor, entumecimiento y picazón en los pies. El tratamiento del neuroma de Morton puede incluir el uso de analgésicos, antiinflamatorios o esteroides. También se puede utilizar una bolsa de hielo o una bolsa de agua caliente para aliviar el dolor. Si el dolor persiste es aconsejable realizar cirugía para extirpar el nervio.

Los cuidados para el neuroma de Morton incluyen el uso de zapatos cómodos y evitar tacones altos y de punta fina, ya que este es uno de los motivos frecuentes que provocan su aparición, con una incidencia mucho mayor en mujeres, generalmente a partir de los 50 años.  También se deben evitar las actividades que causen presión en el nervio  y suspender la práctica de deportes como el running, el tenis o el padel hasta que no mejore, ya que  pueden favorecer la irritación de la base de los dedos. Así mismo, padecer de alguna deformidad en los pies, como dedos en martillo, juanetes o pies planos predispone en mayor medida a desarrollar un neuroma, por lo que se aconseja que las personas que tienen este tipo de problemas presten especial atención al cuidado de sus pies. Cuando se presentan las molestias se pueden aliviar temporalmente haciendo un masaje en el pie, descalzándonos si llevamos un zapato muy apretado o interrumpiendo el ejercicio si estamos realizando alguna actividad física intensa en ese momento. Si observamos que el dolor empeora con el paso del tiempo, debemos acudir a un especialista, ya que, de confirmarse el diagnóstico de neuroma de Morton, la elección del tratamiento variará en función  de la gravedad del neuroma. Un diagnóstico temprano que confirme un caso leve o moderado, puede ayudar a resolver el problema con unas simples plantillas ortopédicas que reduzcan la presión al caminar,  evitando así  tener que recurrir a tratamientos invasivos o quirúrgicos. La cirugía es la última medida a adoptar y solo se realiza cuando los pacientes no han obtenido resultado con las otras terapias alternativas. Los resultados de la intervención quirúrgica generalmente son positivos, dando una solución bastante satisfactoria a este problema.

Como conclusión, queremos hacer hincapié en que el Neuroma de Morton en muchas ocasiones es una dolencia que se puede prevenir, y ahora que se ha puesto de moda el calzado cómodo, no hay razón para castigar nuestros pies más de la cuenta. Guarda pues esos bonitos tacones para ocasiones especiales, tus pies te lo agradecerán.

(Este post no tiene una finalidad diagnóstica sino meramente informativa, en caso de que creas identificar algún síntoma, consulta con tu médic@ de cabecera y/o especialista)